RAZONES PARA NO PORTEAR AL BEBÉ MIRANDO HACIA ADELANTE
Leer artículo original en inglés de Elisabeth Antunovic y en español en Revolución Mamá.
1- No da soporte a las piernas del bebé
Las rodillas del bebé deben subir a la altura de la cadera o más arriba. Esto sólo es posible si la tela en un portabebés cubre toda la parte posterior del muslo, en la parte posterior de la rodilla, o si el portabebés lleva reposapiés.
Cuando el bebé está mirando hacia delante con las piernas sin apoyo, no es que sus piernas estén simplemente colgando, es que ni su columna vertebral ni su cadera tiene soporte, simplemente no hay ningún asiento para que el bebé se apoye. Una mochila porta bebé que sostiene las piernas estimula el desarrollo de la cadera correcta. Los portabebés para porteo cara el mundo no dan soporte a las caderas de los bebés. Aquellos bebés ya diagnosticados de Displasia de cadera no deberían usarlos.
2- Es más difícil para el portador llevar al bebé
Es mucho más pesado llevar algo que sobresale de tu cuerpo que algo que se te abraza al cuerpo. Así el portador tiene una carga difícil de llevar y muchas veces termina arqueando la espalda para compensar. El organismo de los bebés se adapta naturalmente a ser llevado hacia tí.
3- Coloca al bebé en una posición en que la espalda queda arqueada o hueca haciendo presión a la inestable columna vertebral del bebé
Un bebé sin soporte en las piernas y mirando hacia fuera está inestable, lo que le obliga a adoptar una posición “hueca” de la espalda (como se muestra con línea roja) para compensar. Estirar la espalda (como arquearse después de despertarse de una siesta), no es perjudicial o “malo” en sí mismo. El problema surge cuando se comprime una lordosis con el peso. Colocando al bebé en un portabebés hacia el frente se estira la curva convexa redondeada natural (ver la columna vertebral del desarrollo infantil en el documento de transporte en posición vertical) de la columna vertebral en una posición de lordosis. Sin nada donde aferrarse, se debilitan los músculos abdominales, y se retraen los hombros, así la pelvis del niño se inclina hacia atrás y se ve obligada no sólo a llevar el peso de su propio cuerpo, sino también a absorber la fuerza de cada paso que el portador realiza – todo en su pequeño y delicada columna vertebral.
Efectúa una presión indebida sobre la ingle y puede molestar a la zona interior de los muslos del bebé
Este bebé se apoya en su padre para tener apoyo adicional. A pesar de que le estabiliza, no es recomendable pasar el día siendo transportado en esta posición. Estar suspendido por las partes más sensibles de su bebé no es lo ideal, especialmente para los niños (varones) pequeños.
4- Puede sobreestimular a tu bebé
los bebés pueden estar de cara a sus padres y seguir experimentando en el mundo que les rodea a su ritmo. Es muy fácil para un niño pequeño sentirse abrumado.
5- No da soporte a la cabeza y el cuello
La asfixia posicional puede ocurrir cuando los bebés no tienen ningún control del cuello y la barbilla cae hacia el pecho. Los bebés pequeños nunca deben ser colocados en una posición que pueda poner en peligro sus vías respiratorias. En los EE.UU. la Comisión de Seguridad de Consumidores aprobó una ley que para que las etiquetas de advertencia de los portabebés orientados hacia adelante estén obligados a indicar que los bebés no deben mirar hacia afuera hasta tener un control adecuado de la cabeza / cuello. La ley no se aplica a los bebés dormidos a pesar de que tampoco tienen control de sus cuellos o cabezas mientras duermen.
6- Dificulta la termorregulación
En la posición de flexión de un bebé en el pecho de su madre se conserva el calor de un modo más eficiente que si el bebé está hacia afuera con el pecho al descubierto. Infórmate sobre el método canguro y los beneficios de termorregulación. El bebé además tiene más células de grasa (de aislamiento) en su parte trasera que delantera.
7- Hace más difícil responder a las señales del bebé
Sin contacto visual es más difícil comunicarse con su bebé, comprobar sus vías respiratorias, detectar sus eructos o reflujo, conocer sus necesidades… Hay un claro estudio que muestra que incluso los cochecitos mirando hacia adelante pueden interferir con su capacidad para interactuar y responder a su bebé.
8- Altera el centro de gravedad del bebé
Con mucha frecuencia el portador intuitivamente colocará hacia adelante sus dedos índices para que el bebé pueda agarrarse y estabilizarse o tratará de sujetar las piernas del bebé levantándolas hacia adelante. Sin asiento ni nada para agarrarse delante de él es difícil para el bebé no arquear la espalda con el peso de su propio cuerpo.
9 – Puede no ser muy agradable para tu espalda
Llevar una carga con una columna vertebral arqueada ocasiona un dolor de espalda inferior. Llevar a su bebé mirando hacia delante no es la mejor opción. No es “cruel”, pero no es lo ideal.
Llevar al bebé hacia nosotros, como si lo estuviéramos abrazando es tal y como el bebé está adaptado para ser llevado y la manera natural de desplazarse.
Feliz porteo!